El gobierno Syriza-ANEL avanza en la mayor liquidación de los bienes públicos en la historia contemporánea. En pocos meses toda la riqueza pública será transferida a un superfondo de venta en bloque, que está bajo el control directo y la administración de los acreedores, y sus gastos van directos al “Minotauro de la deuda pública” ¡para un siglo entero!
El gobierno griego paralelamente avanza en la liquidación directa y la privatización de empresas (venta de la tasa de DEH), de los espacios públicos y de las infraestructuras (Egnatía Odós), en la comercialización y privatización indirecta de todos los bienes públicos, lo que los convierte en mercancías para la rentabilidad de propietarios actuales y futuros (con las decisiones más características de la “fijación de tarifa del agua”.
Esta política constituye un delito contra las y los trabajador@s, el pueblo y nuestro propio país, porque la privatización de los servicios y bienes públicos, que condujo a un aumento de las tarifas y al derrumbe de las infraestructuras públicas, porque los capitalistas miraron como siempre sobre todo por sus beneficios. Porque destruye a largo plazo cualquier posibilidad de soberanía popular e independencia frente a los intereses de los acreedores, y de cualquier política en provecho de la clase trabajadora y la juventud.
El gobierno Syriza-ANEL avanza junto con las “instituciones” de la Unión Europea y el FMI en esta horrible política porque juntos atienden y sirve a los intereses del capital propio y extranjero que está dispuesto para despedazar la riqueza pública. Esta política la impulsa la UE en toda Europa. Las y los trabajador@s y los sectores populares combaten para impedir y derribar este infierno de los memorádums y a los gobiernos que lo apoyan e impulsan.
ANTARSYA lucha al lado de las y los trabajador@s en la construcción de un frente real de lucha que se apoye en las decisiones de los sindicatos de base y en los comités de lucha, contra la inacción de la burocracia sindical, que se enfrentó con un “Buenos días” al gobierno de Tsipras para demostrar que en este frente no quiere hacer nada sino ponerse de perfil, como en el referéndum de 2015.
ANTARSYA apoya las movilizaciones de las y los trabajador@s de la EYDAP (compañía pública de aguas) y de todos los demás sectores de trabajador@s afectados y llama a una lucha combativa en todas sus formas, incluso con ocupaciones, para derribar esta miserable decisión de este miserable gobierno.