El próximo día 23 de abril tendrá lugar la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Francia. Desde Izquierda Anticapitalista Revolucionaria IZAR queremos mostrar nuestro apoyo a la candidatura de Philippe Poutou, del Nuevo Partido Anticapitalista (NPA). Después del movimiento contra la ley trabajo, las huelgas sectoriales y generales que la clase trabajadora ha impulsado, es necesario que una candidatura liderada por un obrero defienda durante esta campaña lo mismo que se estuvo defendiendo en la calle durante la primavera 2016. Al contrario que Le Pen, Macron, Fillon o Hamon, la candidatura del NPA pone sobre la mesa una salida anticapitalista a la crisis a la vez que insiste en que la única forma de luchar contra el paro, contra los recortes, contra la precariedad, contra el racismo, la xenofobia o y el machismo sigue siendo mediante la movilización sostenida de la clase trabajadora y de la juventud.
Ya hemos visto la experiencia de la izquierda reformista en Grecia, que no ha tenido ningún tipo de capacidad para imponer políticas distintas de las que se venían desarrollando. De igual modo, en Francia, la única salida favorable para las y los trabajadores pasa por su autoorganización, su movilización, por la huelga general, y por poner encima de la mesa el reparto de la riqueza, la prohibición de los despidos y la reducción de la jornada laboral sin disminución salarial.
Como ya sucediera en las elecciones presidenciales del 2002, la candidata del Frente Nacional (FN) estará, según todas las previsiones, en la segunda vuelta el próximo 7 de mayo. Esto es de nuevo el resultado de una política antisocial llevada a cabo por la supuesta izquierda: en el 2002, por la izquierda plural de Jospin en coalición con el Partido Comunista francés (PCF) y los Verdes. Y hoy por el binomio Hollande-Valls. Por ello, de nuevo ahí, la mejor forma de enfrentarse a Le Pen y al aumento de las organizaciones de extrema derecha pasa por movilizarse contra las reformas que se enfrentan a la clase trabajadora y a la juventud y por una salida anticapitalista a la crisis. Le Pen, Macron, Fillon o Hamon defienden a las claras unos mismos intereses.
Desde Izquierda Anticapitalista Revolucionaria pensamos que a pesar de las divergencias existentes entre la candidatura de Lucha Obrera (LO) y del Nuevo Partido Anticapitalista (NPA), habría sido positivo para los intereses de la clase trabajadora y de la juventud construir una candidatura conjunta para lograr tener mayor impacto durante esta campaña.
Por último queremos también apoyar la manifestación que tendrá lugar el día antes de la primera vuelta, el sábado 22 de abril, convocada por sectores de trabajador@s en lucha de diferentes sindicatos (SUD o CGT) como las y los trabajador@s de Goodyear, de correos, del ferrocarril, de la sanidad, de educación, del comercio o de la energía. Al igual que l@s convocantes de dicha manifestación, pensamos que es mediante la movilización sostenida y la huelga como se conseguirá imponer un programa de ruptura con el sistema capitalista y como mejor se conseguirá luchar contra el racismo y la xenofobia.