A las plataformas en defensa del Sistema público de pensiones ni nos ha sorprendido ni nos ha preocupado la noticia de que la Comisión Parlamentaria de seguimiento del Pacto de Toledo haya “saltado por los aires”. Siempre hemos dicho, y así lo tenemos recogido en nuestras reivindicaciones, la derogación de las normas que regula el Pacto de Toledo, pues su fin orgánico es la de ceder a las presiones internacionales, BMI, FMI, BCE, en contra del Sistema público de pensiones, al mismo tiempo pedimos la eliminación de la Comisión Parlamentaria de Seguimiento de este pacto, pues desde su creación ha sido un laberinto sin salida a un verdadero Sistema Público de Pensiones…Nunca han dictaminado sus resoluciones de propuestas, desde una óptica social, y cuando esto ha ocurrido, el resultado es tan ambiguo, que cada portavoz de esa misma comisión le da una interpretación diferente.

Cuando la ministra de Trabajo Fátima Báñez compuso la Comisión el 28 de septiembre de 2016, le encargó 22 puntos para su valoración, de los cuales y después de más de 2 años solo han discutido y enviado al gobierno para su consideración 5 puntos, quedan pendiente 17 puntos sin consensuar. Está más que claro que el rendimiento productivo de esta comisión es muy bajo o escaso. Lo que es seguro que ninguno de los 46 miembros y sus correspondientes asesores devolverán el dinero percibido durante este tiempo, pues si se sabía de la falta de consenso, la presidenta tuvo que haber disuelto la comisión hace dos años.

Es claro que ya hemos entrado en campaña electoral, y no hay otro motivo, el PP y la señora Celia Villalobos no podía entregarle al gobierno del PSOE ninguna propuesta que le pudiera beneficiar electoralmente, (no al Sistema público de pensiones) y en éste campo es donde se mueve cada un@ de los 46 diputados y diputadas que pertenecen a esa comisión.

Como decíamos más arriba, para la defensa del sistema público en general y el de las pensiones en particular, no nos hacen falta comisiones institucionales, lo que hace falta es la autoorganización y la lucha en las calles. Somos expert@s, pues la mayoría de nosotras y nosotros, en los años 60, 70 y 80, fuimos activistas en muchos campos y fueron muchas las conquistas que hoy se han ido perdiendo todas. Sabemos que nuestros enemigos son muy fuertes, pero tenemos confianza en nuestra fuerza. Lo demostramos el 22 de febrero y 17 de marzo de 2018, que acabamos por doblarles el pulso a la ministra y a todo el gobierno de Rajoy. Nos dijeron que no había dinero para nuestras pensiones y que siendo muy generosos se nos subía el 0,25%. Y les contestamos, claro que les contestamos con millones de pensionistas y muchos apoyos solidarios. La subida de las pensiones pasó del 0,25% al 1,60 que era la previsión del I.P.C.

Nuestras reivindicaciones aún no las hemos conquistados, y tenemos nuestra llama de lucha encendida. Y estará encendida hasta la victoria final. Como plataforma, sabemos a quiénes no apoyaremos. Los 3 partidos de la Plaza de Colón no recibirán nuestros votos por eso.

Gobierne quien gobierne, las pensiones se defienden y las movilizaciones se mantienen