El gobierno del estado, apoyado por el PSOE y C’s, empeñado en su política represiva contra el derecho a decidir en Catalunya

Primero fue mediante el despliegue de policías y guardias civiles para impedir que el pueblo catalán pudiera ejercer su derecho a voto el pasado 1 de octubre. A pesar del intento de clausurar colegios y urnas y de recibir a los votantes con porras, más de 2 millones de catalanes salieron a votar. Luego fue mediante la aplicación del 155, la destitución del gobierno de la Generalitat legítimamente elegido y mediante el encarcelamiento de miembros del Gobierno catalán y de los portavoces de las asociaciones pro derecho a decidir como los “Jordis”. Ahora mediante el intento de criminalizar a los Comité de Defensa de la República (CDR) tratando de imputar a sus miembros destacados por supuesto delito de rebelión y terrorismo.

La política de Rajoy, Sánchez y Ribera no ha dejado lugar a dudas. Frente a la existencia del deseo en Catalunya de poder decidir sobre su futuro (hasta un 80% está a favor del derecho a decidir según las encuestas), las instituciones del Estado Español responden mediante las porras, los encarcelamientos y las difamaciones.

Incluso a los países de la UE involucrados en el “conflicto” catalán les cuesta seguir esa lógica represiva

No se puede tildar a Alemania, Bélgica, Suiza o Reino Unido de países antisistema o pro independentistas catalanes. Sin embargo incluso a ellos les cuesta seguir el ritmo del Estado Español en materia represiva. ¿Eso qué quiere decir? Pues que a día de hoy, los presos políticos encarcelados  por supuestos delitos de rebelión y sedición, quedan en libertad en los demás países europeos juzgados por los mismos delitos. El propio Comité de Derechos Humanos ha realizado un requerimiento y una petición al Gobierno español para que garantice los derechos políticos de Jordi Sánchez y para que pueda de ese modo presentarse como candidato a la investidura para ser elegido President de la Generalitat.

Así pues, el pasado 5 de abril, la justicia alemana dejaba en libertad al propio Carles Puigdemont descartando el delito de rebelión al no apreciar en ningún caso violencia. Esto ha sido un duro revés para el gobierno de Rajoy, el juez Llarena y sus aliados. En efecto, ya sólo cabría la posibilidad de extraditar a Puigdemont por un supuesto delito de malversación, delito por cierto por el cual aún no se ha pronunciado la justicia alemana.

Nuevas movilizaciones en Catalunya por los derechos democráticos del pueblo catalán

Desde que se detuviera en Alemania a Carles Puigdemont, las movilizaciones no han cesado en Catalunya. Manifestaciones, ocupaciones, cortes de carretera, organizados por los CDR, se han ido multiplicando. El domingo 15 de abril, fueron más de 750 000 personas las que salieron a la calle en Barcelona para exigir la libertad de los presos políticos y el final del 155 en una manifestación convocada por Omnium Cultural, la Asamblea Nacional Catalana (ANC) así como por  organizaciones sindicales como CCOO y UGT o la federación mayoritaria del AMPA en Catalunya.

Por mucho que se empeñe Rajoy y sus jueces en encarcelar a políticos, en acusar de terrorismo a l@s trabajador@s y la juventud que se moviliza por la defensa de sus derechos democráticos, la movilización y el deseo de poder decidir su futuro no dejará de existir en una gran parte del pueblo catalán. El régimen del 78 y sus instituciones se apoyan para llevar a cabo su política de represión en el silencio y la connivencia de gran parte de l@s trabajador@s y de la juventud del Estado Español. Las organizaciones de la izquierda política y sindical del conjunto del Estado Español deben tomar sus responsabilidades y llamar a una movilización estatal por los derechos democráticos y en contra de la represión a las ideas en Catalunya.

En unos tiempos en los que se encarcelan en el resto del Estado Español a activistas, sindicalistas y raperos por ejercer su derecho de expresión y manifestación, en los que se maltratan a inmigrantes y se censuran a artistas es urgente generar un movimiento de respuesta a esa oleada represiva que conecte con las demandas sociales de la mayoría ya que en la defensa de esas conquistas sociales estaremos enfrentados también a la represión de Rajoy y compañía.

Desde Izquierda Anticapitalista Revolucionaria IZAR, nos ofrecemos tal y como ya hiciéramos en el otoño a organizar conjuntamente con otras organizaciones iniciativas en contra de la represión y en solidaridad con el derecho a decidir del pueblo catalán.