Sigue la represión del Estado Español
El pasado viernes 2 de noviembre se hacían públicas las peticiones de penas de cárcel tanto de la Fiscalía como de la Abogacía del Estado. Las penas son durísimas independientemente de la diferencia de ambas acusaciones. La diferencia reside en si la acusación es de rebelión sin armas (Fiscalía) o de sedición (Abogacía del Estado). Mientras que la Fiscalía califica la fase final del proceso soberanista de “levantamiento generalizado salpicado de actos de fuerza, agresión y violencia”, la Abogacía del Estado habla de “actos de resistencia y desobediencia” y de “situaciones de tensión, disturbios y enfrentamientos”.
Sin embargo, sean cuales sean las diferencias que responden en este caso a intereses particulares del gobierno de Pedro Sánchez que quiere aprobar sus presupuestos y necesita para ello el apoyo de los nacionalistas catalanes, la realidad es que el Estado está desatado y muy decidido a encarcelar a l@s representantes polític@s que permitieron el referéndum del 1-O, no vaya a ser que a otros les dé por volver a poner en tela de juicio, mediante la movilización, la unidad de España o cualquier otro pilar del régimen del 78.
Las penas propuestas por la Fiscalía son de 25 años de cárcel por rebelión para Junqueras (vicepresidente del entonces govern de Catalunya), 17 para Forcadell, expresidenta del Parlament, y para los Jordis, expresidentes de la ANC y de Omnium Cultural, y 16 para los exconsellers. En cuanto a las de la Abogacía, hablamos de 12 años de cárcel para Junqueras, 11 y medio para los cinco exconsellers que siguen en prisión, 10 para Forcadell y ocho para los expresidentes de la ANC y de Omnium Cultural. Ambas peticiones de penas de cárcel son un auténtico escándalo y muestran a las claras como actúa el estado cuando ve sus intereses peligrar. Es un aviso a navegantes muy claro: con la unidad de España no se juega, lo mismo que tampoco, por si a alguno se le ocurriera, con la monarquía o con la propiedad privada.
“Los actos de fuerza, agresión y violencia” son del Estado Español
Hay que invertir su relato. “Los actos de fuerza, agresión y violencia” existieron pero fueron utilizados por el estado español contra el pueblo catalán que sólo pretendía poder votar y decidir su futuro. Hay que recordar que los encarcelamientos preventivos, la violencia y las agresiones de la policía nacional y de la guardia civil el 1-O y los días previos, la aplicación del 155 y la consiguiente destitución del govern de Catalunya y disolución del Parlament, los cambios legales del gobierno de Rajoy para facilitar la salida express de las sedes sociales de las empresas en Catalunya para presionar al movimiento independentista tuvieron como único objetivo evitar que los y las catalanes pudieran simplemente pronunciarse votando con unas papeletas y en unas urnas que en todo momento el Estado Español trató de incautar.
Por mucho que desde las instituciones del régimen del 78 se trate de asemejar la organización de un referéndum y la autoorganización de al menos una parte muy significativa del pueblo catalán a un golpe de estado, dichas instituciones no van a conseguir que desaparezcan las ansias de autodeterminación de más de 2 millones de catalanes y catalanas al igual que el régimen franquista no consiguió acallar las ansias de acabar con el fascismo a pesar de los asesinatos y de la represión de los años 60 y 70.
Frente a la represión del estado español, es necesaria una respuesta contundente
No hay tiempo que perder. Con este envite hay mucho en juego. Si mañana la lucha por los derechos democráticos en Catalunya queda aplastada, estaremos en muy mala posición en el resto del estado para arrancar mediante la movilización cualquier conquista social y democrática. Por tanto, es necesaria una respuesta a la altura de los ataques. No hay nada que esperar del actual gobierno español. Defienden, aunque con un discurso más light, la unidad de España al igual que el PP, C’s o Vox. Los vaivenes de Pedro Sánchez que un día habla de rebelión y otro no sólo son fruto de cálculos parlamentarios para poder aprobar los presupuestos y seguir así gobernando. Nada más. Cuando tuvo que aplicar el 155, no dudó y fue de la mano del PP y de C’s. Cabe recordarlo.
Unidos Podemos debería, en lugar de hablar de “peticiones de cárcel desproporcionadas” y de “lamentar la judicialización del conflicto catalán”, tomar iniciativas y tratar de organizar en el conjunto del Estado Español una movilización de rechazo a la represión. Las organizaciones sindicales deberían hacer lo propio y salir del mutismo en el que están a día de hoy. La represión del estado y de las instituciones del 78 no se centra únicamente en contra de l@s pres@s polític@s catalanes, también la ejerce contra todos los sindicalistas, activistas y artistas que osan levantar la cabeza, movilizarse y poner en entredicho al actual sistema.
Los últimos escándalos relacionados con la justicia (el impuesto sobre las hipotecas, las escuchas de Villarejo, las condenas a activistas y raperos) muestran a las claras que no existe división de poderes y que ésta defiende unos intereses muy concretos. Desde Izquierda Anticapitalista Revolucionaria IZAR contribuiremos tal y como lo hemos venido haciendo hasta ahora a que se construyan, en el conjunto del Estado Español, respuestas unitarias en contra de la represión y por los derechos democráticos.
En cuanto a Catalunya, no hay que esperar a que se celebren los juicios y a que se hagan realidad las condenas: hay que organizar ya la respuesta. Ésta debe llevarse a cabo en las calles, en los centros de trabajo y en los centros de estudio mediante la convocatoria de una Huelga General. Para parar esta represión hay que parar Catalunya. Todas las organizaciones, asociaciones y marcos de autoorganización que defienden el derecho de autodeterminación, los derechos sociales y que se posicionan en contra de la represión del Estado deberían hacer cuanto antes ese llamamiento tal y como ya lo hicieron miles de personas concentradas ante la prisión de Lledoners, el 2 de noviembre, pidiendo “abrir la cárceles” y por una “huelga general”.