
Aunque forma parte de una fuerza que se define como republicana sin matices, la cara visible del espacio morado, Yolanda Díaz, considera que ahora “no es el momento” de batallar por un referéndum que sirva a la ciudadanía para elegir entre república o monarquía. En una entrevista en el programa Salvados de La Sexta este domingo, la vicepresidenta segunda del gobierno PSOE-UP y ministra de Trabajo aseguró que no tiene “ningún miedo a la democracia”, pero que un referéndum sobre la forma de estado no es “el tema de centralidad” del país en estos momentos.
Lo mismo ocurre con otro referéndum que especialmente Los Comunes liderados por la alcaldesa de Barcelona Ada Colau, habían puesto insistentemente sobre la mesa en el pasado: el de autodeterminación. Dos debates que el espacio que representan a Colau y Díaz consideran que actualmente no están entre las principales preocupaciones de la ciudadanía ni en el Estado Español ni en Catalunya, respectivamente.
En cuanto a la monarquía, Yolanda Díaz considera que es la “gente la que abrirá las puertas de la historia” cuando sea oportuno. Podemos siempre ha abogado por un referéndum de estas características, pero una vez en el gobierno ha modulado su posición de manera significativa. El exvicepresidente Pablo Iglesias se había pronunciado en la línea de la ministra de Trabajo cuando formaba parte del ejecutivo, recurriendo a la carencia de peso específico de su formación. Si Unidas Podemos fuera la fuerza mayoritaria en el gobierno de coalición–decía– “las cosas serían distintas”.
La posición de Yolanda Díaz también la comparten Los Comunes, que, pese a presentarse como una fuerza plenamente republicana, tampoco ven que ahora se den las condiciones para abrir ese melón. Fuentes oficiales del partido explican que secundan las palabras de la vicepresidenta: siguen defendiendo un referéndum para elegir entre monarquía y república, pero consideran que a estas alturas no existe la correlación de fuerzas suficiente que lleve a una mayoría que permita sacar adelante un referéndum de estas características. Remarcan que mientras no puedan “impulsar” este tipo de consulta, lo que están haciendo es preparar “una ley que regule la monarquía” para dotar de mayor transparencia a la institución.
El 6 de diciembre de 2021, el diputado de Los Comunes y miembro de la mesa del Congreso, Gerardo Pisarello, pedía precisamente avanzar hacia un referéndum de estas características para sacar adelante “cambios constitucionales” que permitieran decidir vivir en una monarquía o una república. “La única clave para que los cambios constitucionales sean posibles es que las generaciones que no votaron la Constitución de 1978 puedan decidir libremente si quieren vivir bajo una monarquía obsoleta y corrompida, o bajo una república democrática, moderna y como las más avanzadas que allí hay en nuestro entorno. Como fuerza republicana, trabajaremos para que ese futuro sea posible y para construir las alianzas sociales que lo permitan”.
En cuanto a la situación del rey emérito, la ministra Yolanda Díaz considera que sólo debe dar explicaciones Juan Carlos I y no el actual monarca, Felipe VI. “Creo que el problema no es que se haya ido o vuelva; de hecho, no entendí muy bien la decisión que se marchara. El problema está aunque él no esté. Cualquier institución merece respeto y merece que conozcamos lo que ha pasado” , ha afirmado. Tanto Los Comunes como Unidas Podemos han pedido varias veces abrir una comisión de investigación al respecto y ha sido vetada por el PSOE, PP y Vox en la mesa de la cámara baja.
Yolanda Díaz tampoco ve urgente un referéndum de autodeterminación en Catalunya, al igual que Los Comunes. “Este debate no está ahora, ni siquiera en Catalunya”, aseguró en la entrevista del domingo. Es la misma tesis que Los Comunes han ido repitiendo en los últimos meses y que defendieron durante el procés. Especialmente, lo hizo la líder de En Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach, en la campaña de las elecciones catalanas del 14F, cuando defendió por activa y por pasiva que la correlación de fuerzas actual no era propicia para impulsar un referéndum de autodeterminación en Catalunya y que abanderar esta petición podría generar frustración. “Quiero que Catalunya esté en España. Soy una demócrata y no hay que tener miedo a nada”, resuelve Díaz, quien también lamentó que no se respete la su realidad “plurinacional”. Sea cuando sea, lo que queda claro es que en la próxima reunión de la mesa de diálogo el referendo sólo se defenderá desde la parte catalana.
Traducción de artículo del diario Ara