Como cada 4 de diciembre l@s trabajador@s y la izquierda andaluza recordamos las movilizaciones de masas de hace 43 años para exigir soberanía plena en un momento de efervescencia de la conciencia nacional. Este año el día nacional de Andalucía tiene lugar en pleno debate sobre el “nuevo andalucismo” al que nuestra organización no es ajena y en el que tomamos posiciones. Creemos que la reconstrucción de dicha conciencia política de nuestra clase debe irremediablemente llevarse a cabo a través de la movilización y no tanto en un discurso centrado en la cuestión del autogobierno limitándolo a una reivindicación permanente de recursos al gobierno español siempre bajo los cauces de la Constitución del 78 y, en definitiva, en gestionar desde Andalucia sus instituciones.
La situación actual de Andalucía, aún más tras esta segunda crisis sociosanitaria que agrava la económica de 2008, responde a unas políticas concretas que nos han condenado al subdesarrollo económico, al paro y a la precariedad dejando las riquezas en manos de unos pocos. Esa política ha sido llevada a cabo históricamente tanto por la burguesía española como por la andaluza, unidas en un acuerdo en el marco del sistema capitalista. Evidentemente la burguesía andaluza existe y explota a los y las trabajadoras andaluzas, por lo que aspirar a gestionar sus instituciones no puede hacernos creer que significa acabar con la situación de subalternidad del pueblo andaluz. No habrá soberanía posible de los y las trabajadoras andaluzas sin expropiar las riquezas de quienes la acaparan aquí y en el resto del estado español.
Una mayor soberanía para Andalucía en abstracto no llevará a cabo un mejor reparto de la riqueza de la misma forma que no asegurará viviendas dignas, la retirada de las bases imperialistas, servicios públicos de calidad, aumentos de salarios, empleos o un justo reparto de la tierra. El problema es quién detenta esa soberanía. Porque tenemos muy claro que para realmente cambiar nuestras vidas, la cuestión de la recuperación de los recursos económicos en Andalucía debe ir ligada a la cuestión de quién debe controlarlos, si las 10 mayores fortunas de Andalucía que acumulan un patrimonio cercano a los 5000 millones de euros o la juventud y la clase trabajadora andaluzas.
Hace ya unos años que desde Izquierda Anticapitalista Revolucionaria IZAR venimos defendiendo esa política en el seno de las manifestaciones que conmemoran el 4D. Las manifestaciones en Granada y Málaga permiten avanzar en esa dirección y por ello nuestra organización participaremos en la misma: en un día nacional de Andalucía como el de 1977 de Tierra, Trabajo y Libertad, que señale que quienes producimos la riqueza expropiemos a los grandes latifundistas, nos enfrentemos a los intereses de los grandes empresarios andaluces y no paguemos su deuda.