Son ya varios años de crisis económica, de la que solo algunos están saliendo (cabe destacar que las empresas del IBEX 35 aumentaron sus beneficios en 2015 y 2016 23.347 y 33.000 millones de euros respectivamente) que se muestran con mayor crudeza en zonas de Andalucía como la provincia de Granada (28 % de paro, rondando el 60% a nivel juvenil y el 32 en el caso de las andaluzas). Una tierra para las que el capitalismo Europeo y español, no ofrece más que una economía dependiente, paro y empleo precario. Es en este contexto donde se enmarca la situación de los/as trabajadores/as de la hostelería. Un sector en claro crecimiento económico varios años de récords turísticos que lo consolidan como uno de los pilares de la economía de la provincia. Pero, lo cierto es que gran parte de ese éxito del que el Gobierno de la Junta de Andalucía o diputación se enorgullecen recaen sobre las espaldas de los/as trabajadores/as de la hostelería para los que sólo existe precariedad laboral. Porque la norma es el incumplimiento sistemático del convenio con bajos salarios, sin contratos de trabajo y con jornadas que superan las 10 horas diarias.
A pesar de todo, la patronal de la hostelería no para de quejarse y propone un gran recorte del convenio en muchos aspectos, regularizando a la baja las condiciones de trabajo realmente existentes en el sector. Es un discurso muy conocido y raído ya por parte de los capitalistas y empresarios que usan en este caso su crisis como excusa para recortar salario y derechos a los trabajadores y engrosar sus beneficios año tras año. Porque no debemos olvidar que la patronal de la hostelería no es un caso aislado. En el fondo del problema encontramos un modelo económico basado en la propiedad privada, el capitalismo, que es una fuente de precariedad y explotación para el conjunto de la clase trabajadora, tanto en el Estado Español como en el resto de países del mundo. Es una propuesta, la de la patronal, inadmisible y debemos ayudar en todo lo posible a que los trabajadores obtengan una victoria. Una victoria que nos permita demostrar que la movilización de los trabajadores es la única herramienta capaz de doblegar los intereses de la patronal.
Desde IZAR, nos sumamos a la convocatoria de manifestación impulsada por las organizaciones sindicales bajo el lema “en defensa del convenio colectivo y su aplicación en todos los centros de trabajo”. Nos parece que esta movilización es un gran avance pero que no será suficiente para frenar las pretensiones de la patronal. Para ello, será necesario sumar a más trabajadores, realizar nuevas movilizaciones y convocar una huelga sectorial que lo paralice.
Así mismo, no debemos olvidar nuestro enemigo común y entender la lógica de este sistema de explotación y precariedad. Este es un llamamiento también a que nos concienciemos de nuestra posición social y que el problema aunque ahora se visualiza para los trabajadores del sector va más allá. Por eso, debemos sumarnos todos a esta movilización así como al resto de las movilizaciones en defensa de los intereses de la clase trabajadora.
En este sentido, encontramos las reivindicaciones y acciones impulsadas por las marchas de la dignidad como la unificación de las luchas, el no al pago de la deuda, la derogación de la reforma laboral etc y la manifestación centralizada que tendrá lugar el próximo 27 de mayo y a las que pensamos dese IZAR que debemos sumarnos.