
Una manifestación muy necesaria
Al final se celebraron 2 manifestaciones el 28F. Tal y como ya explicábamos el mes pasado, esa doble convocatoria no era fruto del capricho sino de un debate crucial: ¿se pueden denunciar, desde la calle, las políticas antisociales del gobierno del PSOE-UP? (http://izar-revolucion.org/el-28f-yo-voy-a-cadiz/). Una vez más, y como ya sucediera en Andalucía en 2012 cuando POSE-IU estaban al frente de la Junta de Andalucía, la conformación de un gobierno de coalición de “izquierdas” trae consigo una batalla para mantener la independencia de los sectores que se movilizan con respecto a esos mismos gobiernos. Por aquel entonces, Diego Valderas (IU) estaba al frente de la vicepresidencia de la Junta y mientras él justificaba la política de recortes por el ya famoso “imperativo legal”,su organización trataba de acallar, en la calle, cualquier crítica a sus políticas señalando como único responsable de los recortes al gobierno de Rajoy o a la UE.
10 años después, vuelve a pasar lo mismo pero esta vez al revés. Ahora se trata de acallar las críticas a las políticas antisociales del gobierno estatal de PSOE-UP y de centrarlas únicamente en el gobierno andaluz. Para ello, IU y Podemos decidieron desmarcarse de la convocatoria anual de las Marchas de la Dignidad, que llevaban desde 2017 convocando las manifestaciones del 28F con un claro contenido de independencia de clase, para convocar una manifestación diferenciada en la que no estuviera presente ninguna denuncia explícita al gobierno de Pedro Sánchez y de Yolanda Díaz. Nada por tanto de señalar la responsabilidad de dicho gobierno en cuestiones relacionadas con la subida de la luz, la ineficacia del IMV, los desahucios, los ERTEs que se convierten en EREs, la masificación de las aulas y el deterioro de la sanidad pública, la no derogación del pensionazo, de la ley mordaza o de la reforma laboral, el envío de tanquetas a Cádiz para reprimir a los que se movilizan o el de fragatas al Mar Negro.
Hay que lamentar que la dirección de la CGT Andalucía junto con organizaciones sindicales como Cobas o la CNT haya sido la única con una posición clara con respecto a esta cuestión. Lejos queda la posición intermedia de USTEA llamando a participar en ambas manifestaciones o la del SAT apostando claramente por la de Sevilla.
La cuestión electoral pesa más que la construcción de una movilización 100% independiente gobierne quien gobierne
Tiene sentido que las direcciones de IU y de Podemos traten de acallar, desde la calle, cualquier crítica a SU gobierno. Hay que lamentar, sin embargo, que le sigan el juego direcciones sindicales supuestamente alternativas que por estar claramente integradas en dichos partidos deciden colaborar con la desmovilización y el debilitamiento de cualquier movimiento claramente independiente de Su gobierno aunque éste aplique políticas antisociales. Confiamos, en ese sentido, en que los sectores críticos de dichas organizaciones sindicales consigan revertir esta dinámica que viene ya existiendo desde hace tiempo.
La implicación de la dirección del SAT nacional en la convocatoria de Sevilla no sólo la ha hecho posible sino que le ha dado cierta legitimidad entre los sectores más combativos. Hay que reforzar un sindicalismo que sea no sólo independiente del Estado y de la patronal sino también de las organizaciones políticas que acaban aplicando políticas en contra de los intereses de los y las trabajadoras. En ese sentido hay que lamentar el tono timorato de la dirección del SAT nacional que ante la nueva reforma laboral hizo público una declaración el 4 de enero de 2022 en la que ya dejaba presagiar este tipo de contradicción al responsabilizar a todos menos a Unidas Podemos de la no derogación de la Reforma Laboral que ha conducido en todo momento Yolanda Díaz. Claro que son muchos los responsables de que no se haya derogado la reforma laboral de Rajoy. La UE, la patronal, las direcciones sindicales de CCOO y UGT, el PSOE… pero también la dirección de UP que privilegia gobernar y la política del mal menor a la de construir desde las centros de trabajo y la calle una respuesta para imponer otro tipo de políticas.
También merece la pena analizar, con respecto a este 28F, las posiciones de Adelante Andalucía y de las organizaciones que la componen al apoyar con la boca pequeña la manifestación de Cádiz pero movilizándose en la práctica para la de Sevilla a la que asistió su portavoz Teresa Rodríguez y con un acto político convocado esa misma tarde en la capital andaluza. En ese sentido, los discursos públicos no han podido ser más liosos en estas últimas semanas evitando posicionarse claramente por una u otra manifestación, dando una supuesta libertad para que cada cual acuda a la que crea conveniente pidiendo incluso que en el futuro se haga lo necesario para que haya una única manifestación dejando de lado las razones políticas que han provocado que haya dos convocatorias este año.
A nadie se le escapa que las próximas elecciones andaluzas han sido un elemento central para que Adelante tomara todas estas decisiones. Se ha priorizado una vez más una aparición en una manifestación con fines electorales en la que estaría presente Unidas Podemos y Andaluces Levantaos (Más País) a pesar de no compartir supuestamente el discurso político en lugar de una manifestación con un discurso independiente gobierne quien gobierne pero eso sí seguramente con menos tirón mediático.
Después del 28F hay que seguir reforzando un marco que se movilice gobierne quien gobierne a favor de los intereses de la clase trabajadora y de la juventud
La gran manifestación de Cádiz (más de 2000 personas) ha sido un primer paso. Las organizaciones integradas en los partidos del gobierno central abandonaron, antes del 28F, las Marchas de la Dignidad al ver que ésta mantenía una independencia clara con respecto a todos los gobiernos incluido el suyo y con el fin de debilitar dicho espacio. Sin embargo, el éxito de la manifestación de Cádiz ha conseguido el efecto inverso. Las Marchas de la Dignidad a nivel andaluz salen reforzadas así como sus coordinadoras a nivel provincial. A partir de ahora hay que seguir reforzando y ampliando este marco que ha vuelto a demostrar su naturaleza por tratar de reagrupar a todos los sectores en lucha que se enfrentan a las políticas antisociales del gobierno de Moreno pero también del de Sánchez.
Desde Izquierda Anticapitalista Revolucionaria IZAR vamos a seguir apostando por un marco unitario que sea tan fiel a los intereses de los y las trabajadoras como lo es la patronal a los intereses de los ricos. Ninguna ilusión sobre los cambios mediante las contiendas electorales y mediante los debates parlamentarios. Nuestras condiciones de vida y nuestras conquistas sociales siempre se han defendido y arrancado mediante la movilización y las huelgas con total independencia de los que nos gobernaban. Las Marchas de la Dignidad deben seguir jugando ese papel en el futuro. Es responsabilidad de todos los sectores sindicales y sociales combativos así como del conjunto de la izquierda anticapitalista, revolucionaria y soberanista consecuente fortalecer y ampliar este espacio en los próximos meses.